20.8.07

Tres pensamientos incensatos

Ser o no ser, no es la cuestión. No hay otra respuesta.

Tú y yo por ejemplo somos dos expresiones de la realidad, el espacio y el tiempo plasmados en diferentes tonos, espacios y tiempos.

Cuando escribo esto soy yo, existo por mi mismo y lo demuestran mis palabras. Cuando lees esto, vos existes, estas ahí en un diferente tiempo y espacio al mío. Lo que facilita nuestro intercambio de existencias es aquel maravilloso desarrollo (r)evolucionario al que en español conocemos como La Palabra, que existe en si misma en un espacio y tiempo infinito y eterno, porque queda grabada por siempre en este disonar de movimientos del teclado, lapicero, labios y ojos.

Es la palabra y lo que esta plasma en nuestras imaginaciones y pensamientos lo que también define otra esfera de nuestra existencia. La existencia social. Llamemos a este socio-existencia. Es decir (como creo que lo dije antes, existo sólo cuando otro X existe y viceversa).

Y aunque pretendo existir en este momento (cuando escribo esto), solo se manifiesta mi existencia en el momento en que vos lo lees. Y vos no existes sino hasta que te haces participe de la existencia ajena, la mía.




Desechando insensatas clasificaciones temporales, narro o pretendo fotografiar con palabras una imagen que se me quedo de mi reciente viaje.

Dos de la madrugada de un sábado por la noche en las inmediaciones de Independencia en las alturas de Cochabamba. En medio de muchas guitarras y después de varias horas de bailanta con el grupo del que formaba parte y la gente del lugar, me puse a hablar del presente con un lugareño.

Estuvimos trabajando por muchas horas con la gente del lugar, yo no soy medico, pero un grupo de estudiantes de medicina y un grupo de estudiantes extranjeros de la misma rama habían organizado esta visita a uno de los tan empobrecidos pueblos de mi querida llajta. La última vez que participe de uno de estas cosas fue en el 2005. Así que las cosas se me hacían más emotivas aun.
-
Y usted que piensa del nuevo gobierno?
-
Mire joven, yo de política nu se nada. Pero recien se ha termenado de construir una escuelita y la posta de salud. Yo sulo he ido hasta el tercero de premaria, y mis wawas ahura van a aprender mas cusas. Ahura se que antes no se hacean estas cosas, no porque no habia plata, sino porque no se querea. Dígame usted que piensa del nuevo gobierno.

Pues que podría haberle dicho.
Sin que nadie se moleste. Y sabiendo de las discusiones de si Sucre debería o no ser la capital, o si el Evo es su payaso de Chávez, o etc. Me animo a decir que me alegro mucho porque el pueblo de independencia cuente con una escuelita, y que con suerte la posta sanitaria y el nuevo camino asfaltado ayuden
a su ‘desarrollo’.
Y seguramente habrá quien cuestione las responsabilidades municipales y ejecutivas, y otros que argumenten que poniendo una escuelita en el culo del cóndor no lleva al país adelante. Pero en fin. Lo que si he visto en mi país. Es cambio. Rápido y General. Y eso no siempre es fácil de llevar a cabo, y mucho
menos acostumbrarse al mismo.



Los Heraldos Negros (Cesar Vallejo)

Hay golpes en la vida, tan fuertes ... ¡Yo no sé!
Golpes como del odio de Dios; como si ante ellos,
la resaca de todo lo sufrido
se empozara en el alma... Yo no sé!

Son pocos; pero son... Abren zanjas obscuras
en el rostro más fiero y en el lomo más fuerte.
Serán talvez los potros de bárbaros atilas;
o los heraldos negros que nos manda la Muerte.

Son las caídas hondas de los Cristos del alma,
de alguna fe adorable que el Destino blasfema.
Esos golpes sangrientos son las crepitaciones
de algún pan que en la puerta del horno se nos quema.

Y el hombre... Pobre... pobre! Vuelve los ojos, como
cuando por sobre el hombro nos llama una palmada;
vuelve los ojos locos, y todo lo vivido
se empoza, como charco de culpa, en la mirada.

Hay golpes en la vida, tan fuertes... Yo no sé!



16.8.07

De un poema de Jaime Saenz

A mi tambien me cuesta decir nada. Quien mejor que Jaime Saenz para mostrarnos facetas de lo real.... tan totalmente falso, cargado de insensibilidad y frustracion. Cargados de muerte.


RECORRER ESTA DISTANCIA
IV
Los grandes malestares causados por las sombras, las visiones melancólicas surgidas de la noche,
todo lo horripilante, todo lo atroz, lo que no tiene nombre, lo que no tiene porqué,
hay que soportarlo, quien sabe por qué.
Si no tienes qué comer sino basura, no digas nada.
Si la basura te hace mal, no digas nada.
Si te cortan los pies, si te queman las manos, si la lengua se te pudre, si te partes la espalda, si te rompes el alma, no digas nada.
Si te envenenan no digas nada, aunque se te salgan las tripas por la boca y se te paren los pelos de punta; aunque se aneguen tus ojos en sangre, no digas nada.
Si te sientes bien no te sientas bien. Si te quedas no te quedes. Si te mueres no te mueras. Si te apenas no te apenes. No digas nada.

Vivir es difícil; cosa difícil no decir nada.
Soportar a la gente sin decir nada no es nada fácil.
Es muy difícil —en cuanto pretende que se la entienda sin decir nada,
entender a la gente sin decir nada.
Es terriblemente difícil y sin embargo muy fácil ser gente;
pero es lo difícil no decir nada.





Mejor, me remito a vivir...
A decir lo que pienso....

Divago!!

Si volvieran los dragones, los miedos también volverían.

Pero no volverán mas!. Han muerto.

Han muerto con los caballeros, cuando estos trataban de rescatar princesas.

Es tan triste esta realidad…. Pero es así real!

Los dragones han muerto junto a los caballeros.

Y las princesas….

Las princesas han muerto esperando a los caballeros que jamás llegaron.

Ahora son todos huesos.

Es también un hueso tu ternura. Son también huesos tus besos.

Las despedidas son eso.

Huesos.

Mil cosas tengo. Cosas hermosas.

Rosas quizá! Sueños quien sabe.

Más no dragones.

Más no soy caballero.

Y tu!

Princesa…

He estado pensando en muchas cosas esta noche. Desafortunadamente no lo he estado haciendo dentro del programa coyuntural e intelectual de mi clase social. Quizás por que no creo en la legitimidad de la misma, (aunque me es siempre muy difícil negar su existencia.) aunque redundo en su no ser. Quizás porque yo mismo me exijo ser un inconsciente. O quizás porque no me exijo ser realista. O quizás, porque me cago en todo. (no literalmente, pero ciertamente en metáfora).

Una botella de ron, no me permite dilucidar todo a un 100%. Gracias a Dios, o quizás al ron.

¿Acaso son tan distintos?

Quiero que me envuelvas en tu olvido.

Plantea una distancia entre los dos.

Detéstame!!

En tus ojos, solo encuentro distancia

Respiro tu nombre, lo siento dentro.

Respiro tus labios, los muerdo

Respiro tus pechos, ya no puedo

Ya nada.

La vida.

Ya nada.

Como hieren tus mentiras

Ya no llueve en invierno.