5.5.07

Con los ojos cerrados

Y Sin Embargo (Joaquin Sabina)

De sobra sabes
que eres la primera
que no miento si juro que daría
por ti la vida entera, por ti la vida entera.
Y sin embargo un rato cada día
ya ves
te engañaría con cualquiera
te cambiaría por cualquiera.
Ni tan arrepentido ni encantado
de haberme conocido, lo confieso
tú que tanto has besado tú
que me has enseñado
Sabes mejor que yo
que hasta los huesos
sólo calan los besos que no has dado
los labios del pecado.

Porque una casa sin ti es una embajada
el pasillo de un tren de madrugada
Un laberinto sin luz, ni vino tinto
un velo de alquitrán en la mirada.

Y me envenenan los besos que voy dando
y sin embargo cuando duermo sin ti
contigo sueño,
y con todas si duermes a mi lado,
y si te vas me voy por los tejados
como un gato sin dueño
perdido en el pañuelo de amargura
que empaña sin mancharla tu hermosura.

No debería contarlo y sin embargo
cuando pido la llave de un hotel
y a medianoche encargo
un buen champán francés
y cena con velitas para dos
siempre es con otra, amor, nunca contigo
bien sabes lo que digo.

Porque una casa sin ti es una oficina
un teléfono ardiendo en la cabina
una palmera en el museo de cera
un éxodo de oscuras golondrinas.

Y me envenenan los besos que voy dando
y sin embargo cuando duermo sin ti,
contigo sueño.
Y con todas si duermes a mi lado
y si te vas, me voy por los tejados
como un gato sin dueño,
perdido en el pañuelo de amargura
que empaña sin mancharla tu hermosura.
Y cuando vuelves hay fiesta en la cocina
y baile sin orquesta
y ramos de rosas, con espinas
Pero dos no es igual que uno más uno
y el lunes, al café del desayuno, vuelve la guerra fría
y al cielo de tu boca el purgatorio
y al dormitorio el pan de cada día.




Cuando canta Joaquín cierro los ojos. Especialmente con esta canción. Una canción que siempre llevo en la cabeza, que queriendo canto, y sin querer a veces lloro. Que explica la sin razón de saberme tonto. Porque la canción de Joaquín me lleva a conocer lo absurdo de mi hacer, y a darme cuenta de todo aquello que ya no tengo, que he perdido.


Una canción de Sabina es algo fascinante, porque me permite pertenecer a un momento colectivo. Un momento en el que muchos hombres y mujeres seguramente también cierran los ojos y quizás también cantan, ríen, y con seguridad tambien lloran…


‘Me encanta mirarte con los ojos cerrados. Porque solo así mis ojos pueden tocarte, sentir tu piel, besarte. Me encanta mirarte con los ojos cerrados, porque cuando lo hago tu cuerpo navega en mi pupila, te haces profunda y certera, llenas mi pupila de locura y ansió’.


Todavía recuerdo aquella madrugada de marzo, yo sentado en un sillón y tu en el sofá. Habíamos estado hablando toda la noche, no recuerdo bien de que, tampoco creo que importe. Solo recuerdo que puse unos casetes mezclados, de Silvio, Spinetta, Milanes, The Doors, unas zambitas y otras cosas mas, todavía tengo el casete, aunque ya no tengo donde tocarlo (de todos modos, pusiste tu nombre en el y por eso pienso guardarlo en un lugar muy seguro).


¿Qué descubrí esa noche? Descubrí que te amaría por siempre, que estaba dispuesto a navegar en tus ojos por el resto de la eternidad con tal de tan solo conseguir un beso tuyo.


‘Cuando se cierran tus ojos, me hago tuyo’, me decía a mi mismo. ‘Cuando se cierren tus ojos, atrápame y ya nunca me dejes salir’ te rogaban los ojos míos.

Ya pronto saldría el sol, recuerdo que te encerré en mis brazos, nos acercamos al balcón y esperamos el amanecer.


Han pasado ya seis años de eso, tus ojos se han hecho eternos y todavía viven en las canciones de aquel viejo casete que ya no escucho. Los míos, siguen ansiándote, aunque la intensidad ya no es la misma. Han pasado ya seis años, y de los sillones nuevos por los que pase hasta perdí la cuenta. Más ninguno navega en mi, porque ya nadie me mira con los ojos cerrados….

5 comentarios:

la de la casa nueva dijo...

Primero lo primero: gracias por el comentario, sin empezar ya has hecho algo, diste un poco de esperanza a mi abandonada casa nueva...
Sin conocerte también me caes bien, la utopía nos ha ligado...
y respecto a el escrito de hoy:
A veces vemos mejor con los ojos cerrados, y todo lo observado se refleja en una mirada, en un recuerdo, en un beso...
Saludos nuevo amigo!

Anónimo dijo...

Juaquin Sabina. un grande, me encanta! me gusto tu post. saludos

DIEGO dijo...

Excelente análisis. Bastante realista tu punto de vista. Soñar no cuesta nada dicen. Pero creo que en este caso, nos esta costando bastante mantener esa idea.
Sin duda, si algún presidente lo consiguiera sería recordado por siempre.
Todo un hito.
Una Bolivia antes y despues de haber vuelto al mar.
Saludos

Anónimo dijo...

disfruto otra clase de musica...
pero iual venia a dejarte electrobesos...

q frio hace

Anónimo dijo...

Yo también tengo varios cassettes que ya no he escucho, quizas por miedo o por vanidad. Pero los recuerdos, que seguro siguen en esa cinta electromagnética, me provocan una ternura indescriptible. Que las cancions de Sabina sigan inspirandote. Muy buen post.