Cuando la conocí fue como el estruendo de un trueno expandiéndose alrededor mío. Supe, en el instante en que me dijo que me llevaba consigo, y que me mostraba sus lugares favoritos en Sucre, que había conocido a alguien especial. Supe en ese entonces, que en repetidas ocasiones habíamos caminado por las mismas aceras, que la posibilidad de habérmela cruzado en las calles, o boliches de mi ciudad existía. Y que por tanto, cruzármela de nuevo por las veredas de cualquier ciudad del mundo, era una certeza. Camine, con ella por Sucre, visitando boliches y respirando paisajes, tejiendo con las nubes imágenes eternas, en las que las montañas, cavan hondo en el corazón, y crean con lágrimas de nostalgia futura cuadros en alto relieve, que uno lleva a las lejanas latitudes en las que habita.
Por mi parte, la lleve conmigo a visitar paisajes, dentro de las latitudes que ahora habito. No hay montañas donde vivo, pero la inmensidad del Atlántico, y la torpeza absorbente con que sus olas huyen y rehuyen de uno, son en verdad cautivantes y dignas de gravar relieves en la mirada de sus testigos. La lleve por las calles de Boston, y Cambridge, visitando librerías, y tiendas que creo que a ella le gustarían. Durante nuestros viajes en metro, le sacamos fotos a todas las publicidades que llamaron su atención, y prometimos sentarnos un día a analizarlas una por una. Fuimos a sentarnos a orillas del Charles River, y a pesar del frió invierno, nos quedamos por un rato mirando los pocos gansos que no han volado al sur, nos quedamos mirando la nieve que nos rodeaba y conversamos acerca del olor de las mandarinas, y los diferentes sabores que éstas tienen en los diferentes continentes en los que hemos estado.
Afortunadamente, el día del año nuevo chino, lo fuimos a festejar al Barrio Chino de Boston, donde vimos una carroza con una rata gigante, fuegos artificiales, y luego una variedad de bailarines, que competían en la Danza del León, todo fue por demás emocionante, especialmente para mí que siempre he sido un apasionado aprendiz de Historia de la China. Al terminar los festejos, regresamos a mi casa caminando, una caminata de 10 kilómetros a través de todo Boston y Brookline, le mostré las calles que recorría, cuando aprendía ingles en Boston University, y estuvimos charlando de un millón de cosas diferentes… desde cuestiones existenciales, hasta las sinrazones y discusiones que generan temas que no tienen la mayor relevancia y que obviamente no recuerdo.
Un viernes por la tarde, nos quedamos en mi casa, viendo películas… vimos dos en castellano, El Lado Oscuro del Corazón y La Educación de las Hadas, luego nos fuimos al cine a las diez, y una vez más vimos Juno. Al regresar, nos quedamos escuchando discos de Pedro Guerra y Fernando Delgadillo, y leyendo poemas de Oliverio Girondo… en los que ella se sumergía, en especial cuando ella afirmaba, que era un cocktail de personalidades (algo que por cierto, no discuto). Yo en cambio, musitaba que ‘si no saben volar, ¡pierden el tiempo las que pretenden seducirme!’ No se de donde, saco un poemario de Jaime Sabines, porque yo no tengo ninguno. Pero me quede prendadísimo de sus poemas, como dije en un post anterior, me abandone por completo a sus palabras.
Otro día, creo que fue sábado si no me equivoco, nos encontramos en el metro de Boston, creo que en la línea roja, y luego tomamos la verde, que conecta con la azul, que nos llevaba al lugar que yo tenía planeado. Como recién me habían regalado un tocadiscos, pues el plan era encontrar discos de vinilo y quedarnos toda la tarde escuchándolos. Estuvimos por tres o cuatro horas, buscando discos de vinilo, encontrar un extraterrestre hubiera sido más fácil que hallar un disco en español, así que nos remitimos a los discos en ingles. Y así en cuestión de unas horas, compramos unos cuantos discos de vinilo, The Kinks, BB King, Eric Clapton, el Dark Side of the Moon de Pink Floyd, y uno que yo sabía que a ella le gustaba muchísimo, de Billie Holiday.
Luego de comprarlos nos vinimos a mi piso, y pusimos los discos… apagamos todas las luces, y como adolescentes nos lanzamos a divagar en la música. Ella sentada sobre unos cojines en el suelo, apoyada sobre el muro, y yo echado en el piso apoyando mi cabeza sobre su muslo que usaba como almohada… Luego puse el disco de Billie Holiday, y una canción en particular inundo cada espacio de infinito que ese rato habitábamos, ‘The Very Thought of You’ o Tan Solo Pensar en Vos, si la traducimos. Yo sentía, y me animo a decir que ella también, que con esa canción, nos convertimos instantáneamente en flores de diente de león, y que cada vez que la voz de Billie se desgarraba, sentíamos como un soplido de viento echaba todas nuestras partecitas a volar, y éstas se quedaban divagando por todas partes, y así continuamente, durante toda la canción nos despedazábamos, entrelazábamos y volábamos en todas direcciones, entremezclándonos en un infinito universo de sensaciones, o mejor aún, en mil multiversos de sensaciones…
Y aunque ninguno podría describir el momento, ambos supimos entenderlo. Y Billie Holiday, que nos agarraba con su voz, y nos arrastraba a la punta del rascacielos más alto del mundo, y los dos invadidos por el vértigo, sin saber que hacer, o como reaccionar, y yo que no podría nunca dejarla caer, y ella que se aferraba a mi mano, y yo que me aferraba a su todo. Y sólo podíamos sentir como el viento nos daba en la cara y nos balanceaba, y zigzagueantes nuestras miradas se cruzaban y perdían en los ojos del otro…
tan solo
si imagino
mejor dicho si se
que mas allá de mi soledad
y de la tuya
otra vez estas vos
aunque sea preguntándote a solas
que vendrá después
de la soledad.
Faltan pocos días para conocernos en persona... Lo que hemos vivido hasta ahora, ha sido sin duda, una experiencia muy única y divertida. Se que la conozco de otras vidas, recuerdo de entre muchas de esas cosas que pasamos juntos, un viaje a Katmandú, que aun vive en los recovecos de mi inaccesible memoria pasada. Recuerdo también canciones compartidas, y momentos de eternidad… que por fantasiosos y personales, no comparto en este post.
Este 2008 será otro viaje, el que nuevamente nos arroje a un vendaval de sensaciones… que nos lleve por diferentes paisajes, que nos envuelva con diferentes canciones, y en el que sobre distintas palabras y silencios compartidos, sepamos decirnos ‘mírame, una vez más estoy aquí contigo.’ Y podamos detenernos a ver los barcos partir de los puertos españoles. A ver las nubes pasar y dibujar los muchos mensajes que nos da la vida. A recoger, o fotografiar piedras y otros absurdos, que nadie más que nosotros podrá entender. A elevarnos en lo distraído de nuestras personalidades… a escuchar nuevamente esos discos… y a compartir nuevamente esos momentos en los que solo los dos sabemos (re)conocernos.
A vos compañera de viaje, te digo, gracias, y pronto nos vemos… la cuenta regresiva de mi blog, está cada día más liviana.
A todos los dejo con la canción de Billie Holiday, y la apropiada traducción al castellano, como siempre la traducción es mía, y no es literal.
Billie Holiday - Tan solo pensar en vos
(Original: The very thought of you)
Tan solo pienso en vos, y olvido hacer
todas esas pequeñas cosas que uno esta supuesto a hacer.
Vivo como si soñara despierto todo el tiempo.
Soy feliz como un Rey,
y aunque parezca una tontería,
para mi, eso, lo es todo.
el eterno esperar por ti,
nunca entenderás,
cuan lento pasan los momentos,
hasta que estoy cerca de ti.
Veo tu cara en cada una de las flores,
y tus ojos, plasmados en las estrellas del cielo.
La sola idea de ti,
mi amor.
11 comentarios:
Justo desde su blog (el de las mujeres invisibles) he llegado yo alguna que otra vez por aquí, pero en silencio. Hoy aprovecho tu comentario en el mío para hacerme visible.
Volveré por aquí, me gusta lo que cuentas.
Qué lindo vivir una soledad tan acompañada, y mejor todavía poder conocer a esa hermosa compañera.
Un saludo desde Chuquiago.
aminuscula: Bienvenida!! a mi tambien me gusta mucho tu blog, y he leido varias cosas ahi, en especial el cuento ese de los calcetines.
saludos!!
Capsula: Muy lindo, aunque a ratos...(la distancia) es triste... pero muy lindo.... el tiempo pasa volando... dicen...
jajajaja
saludos hasta chuquiago!!!
que lindoo, es el amorrr
Solo puedo decir que quedan 24 días, 4 horas, 40 minutos y 59 segundos, 58, 57,56,55...
Que tengas un lindo día
;)
Que buen cuenta cuentos eres. Lo bonito de ellos es que el lector puede reflejar algo de su propia vida en ellos.
How close does it comes to my life ( when I was younger though)jeje
Cuchita: ¡No hay nada más lindo que el amor! De eso no tengo la menor duda.
¡¡Gracias por la visita!!
Saludos!!
Lilyth: 23D:11H:44M:45S… 44S….43S…..
Están pasando rápido los días… eso es bueno… ¿verdad? Y que hacemos…luego… he decidido lanzarme a la librería de Boston, a la de Harvard, a la de Yale, y a la de las otras universidades de este mi pueblo… para encontrar una maquina que detenga el tiempo, o que por lo menos, lo haga pasar más lentito, cuando este ahí con vos… Pero creo que tendré que aprender de cierto cosmonauta que un día imagine, y mandarlo todo al cuerno… porque no necesitaremos de maquinas… para hacer de nuestros segundos… segundos eternos… ¿verdad?
Carmen: ¡Gracias! Me alegra que puedas reflejarte en ellos… lo más lindo en el mundo, es que gente maravillosa, comparta momentos similares, y disfrute de la belleza de la vida, y de lo completamente espectacular y desconcertante que es conocer gente tan interesante y cautivadora como lilyth, y saber… que hay gente que ha vivido cosas similares… si mis días son en cierto modo soleados, cuando me alegra, que también lo sean para otros. It does not matter if you were younger… those memories still live within your soul.
Saludos!!
Che! Leí un Yahoo noticias (nótese la veracidad de mi noticia) que ya se prevén viajes en el tiempo a partir de junio… que dices… te apuntas? jajajaja
Pues estas fantasias son las que inspiran de verdad
Feliz encuentro utópico!!!
Lilyth: pásame la nota… me apunto para viajes en el tiempo, o viajes en el espacio… o lo que sea… quiero subirme al star trek y robarme su maquinita, esa que te telétransporta a donde quieras… no sabes cuanto la necesito…
¿Dónde hay que firmar?
Siempre es mejor, morir tratando de alzar vuelo, que quedarse toda la vida, varado en un puerto de angustia, soledad y silencio (soy un dramático… ¡lo sé!)
Saludos!
Diego: Mi vida es una fantasía… algunas veces me estrello contra la realidad… y quedo tan adolorido… que no puedo lanzarme a volar por un tiempo… pero después el tiempo todo lo cura… y bueno… reiniciar la fantasía, no es sólo la mejor opción, sino la única, que realmente nos permite vivir a plenitud.
¡Gracias por los deseos!
Saludos!
A mi me encanta Billie Holiday, es un descubrimiento que hice de a poquito al comienzo y después se vino el aluvión (de su música, por supuesto)
Mi favorita personal es "You're My Thrill"
Pero en general todo lo que canta provoca en mí más o menos las mismas sensaciones que has descrito en tu post.
Para mi es como si me elevara a otro estado de conciencia...
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